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La temporada de lluvias plantea un desafío importante para equipos pesados como excavadoras. Las lluvias continuas y los ambientes húmedos no solo afectan la eficiencia operativa de la excavadora sino que también pueden provocar daños mecánicos graves. Este artículo proporciona instrucciones detalladas sobre cómo proteger y mantener su excavadora durante la temporada de lluvias para garantizar que funcione de manera eficiente y segura.
Después de completar el trabajo en la temporada de lluvias, la excavadora debe estacionarse en un lugar alto y firme. Esta medida puede evitar eficazmente que el equipo resulte dañado por deslizamientos de tierra, deslizamientos de tierra o inundaciones. Evite áreas bajas y regiones propensas a deslizamientos de tierra al elegir un lugar de estacionamiento para garantizar que el equipo esté en un lugar seguro.
Después de estacionar, asegúrese de que todas las puertas y ventanas de la excavadora estén bien cerradas para evitar que entre agua de lluvia. Corte el suministro eléctrico principal de la máquina y verifique si las tapas del tanque de combustible y del tanque de aceite hidráulico están bien selladas. Incluso si el agua retrocede, no ponga en marcha la excavadora inmediatamente. Primero, levante el equipo a un lugar seguro para limpiarlo y luego realice inspecciones y reparaciones exhaustivas de todos los sistemas.
Primero, verifique si el sistema de admisión tiene agua. Si hay agua en el cilindro, desmonte el motor para una limpieza a fondo. No utilice el método de girar el cigüeñal para expulsar el agua de la camisa del cilindro a través del orificio del inyector, ya que esto puede dañar los componentes de la camisa del cilindro.
Revise la varilla medidora de aceite para ver si el nivel de aceite ha aumentado y si el aceite contiene lodo y agua. El mejor enfoque es desmontar todo el motor para repararlo. Si esto no es posible, realice un desmontaje parcial y limpieza de la máquina. Después de la limpieza, reemplace el aceite del motor, el filtro de aceite y otros elementos de mantenimiento por otros nuevos para garantizar el funcionamiento normal del motor.
Si el tanque de combustible tiene agua, primero drene el agua del fondo del tanque. Deje que el diésel del tanque se asiente y luego úselo para limpiarlo. Lave el tanque con agua a cierta presión, límpielo con un paño, especialmente las particiones y esquinas del interior del tanque. Finalmente, enjuague el tanque con diesel. Desmontar y limpiar las líneas de baja presión y retorno del tanque a la bomba de combustible y secarlas con aire comprimido.
El depósito de aceite hidráulico suele estar sellado. Si entra barro y agua, drene el aceite y el agua del tanque, limpie minuciosamente el tanque y las tuberías, agregue aceite hidráulico nuevo y reemplace el filtro.
Afloje el tornillo de drenaje de la bomba hidráulica y compruebe si el aceite drenado contiene agua. Si no hay agua, inspeccione las válvulas de control y otros componentes (incluido el enfriador de aceite hidráulico). Si no se encuentra agua, la bomba principal, el circuito de aceite de alta presión y los dispositivos de trabajo se consideran normales.
Retire el motor de arranque, el generador y el panel de instrumentos de la excavadora. Límpielos con gasoil y séquelos bien. Verifique todo el circuito eléctrico y las conexiones en busca de óxido o daños. Quite el óxido o reemplace las piezas relevantes si es necesario.
Después de la limpieza e inspección, encienda la máquina para probar si hay alarmas. Pruebe todos los dispositivos de trabajo de la excavadora para asegurarse de que funcionen normalmente.
Durante la temporada de lluvias, la inspección y el mantenimiento periódicos de la excavadora son fundamentales. Después de cada día de trabajo, verifique la entrada de agua y daños en todas las partes del equipo y realice el mantenimiento oportuno.
Para evitar que el agua de lluvia erosione la excavadora, considere construir un refugio o usar cubiertas impermeables al estacionar. Minimizar las operaciones durante fuertes lluvias. Si es necesario, agregue medidas de protección adicionales durante las operaciones, como paños impermeables y guardabarros.
Al operar una excavadora en la temporada de lluvias, el operador debe prestar especial atención al estado operativo de la máquina. Evite trabajos prolongados en aguas profundas o zonas fangosas para evitar que el equipo se atasque o se encharque. Monitoree continuamente los indicadores del equipo durante la operación y deténgase inmediatamente para inspección si se detecta alguna anomalía.
Si la excavadora está sumergida, no la arranque ni encienda el interruptor de alimentación principal. Levante el equipo a un lugar seguro, limpie minuciosamente todas las piezas y luego inspeccione y repare. Asegúrese de que los equipos eléctricos y los sistemas hidráulicos estén completamente secos y libres de agua antes de reiniciar.
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